Mil profecías
Reinaba la noche,
empapado desperté.
Sudando, insomne,
no supe bien por qué.
Haciendo memoria
recordé aquella voz
y aquella historia
que un día alguien contó.
Palabras malditas
retumbaban de una voz,
mi mente se agita
recordando esa obsesión.
Me dejó marcada
por siempre, la razón.
Y aquella mirada,
que jamás nadie olvidó.
Mil profecías jamás lograrán
que los sentidos no puedan volar.
Mil maldiciones no tienen valor
cuando se lucha con el corazón.
Mil profecías no pueden parar
que hoy de nuevo te salga a buscar.
Cien mil hechizos que me harán pensar
en el sentido de la libertad…
libertad….
Burlando a la historia
recorría sin pudor
los tiempos, las horas
que el pasado nos robó.
Buscando palabras
que expresaran de verdad,
aquellas miradas
que jamás pude encontrar.
Malditas las sombras
que en el camino encontré.
Vestida de novia
con la muerte me crucé.
Mostraba orgullosa
sus trofeos, hacia mí.
Traté de perderla
pero no lo conseguí.
Mil profecías jamás lograrán...
Autor(es): Fran Espinosa