Súbito Latido
aún antes de que el sol iluminara tu piel,
te acaricié mientras dormías.
Luego te besé y sin despertarte suave te abracé,
para que me sintieras en tu sueño fiel,
y de perdido en sueños recordarme.
Yo quería escapar para no tener por que mirar atrás,
y ver cosas del pasado que no quiero explicar,
un sentimiento frío y egoísta yo sentía.
Más de pronto un súbito latido palpitábamos
en una sincronía inusitada, no podía creer.
Y en el alba las luces me dejaron ver tu cara,
tu pelo se enmarcaba con la almohada
y te contemplé y te contemplé.
Despertaste con ojos llenos plenos de alegría,
tu boca rosa tibia sonreía
y pude comprender que no me iría.