Hay Vida En El Foie-Gras
me gustan, dijo ella, no así.
El revisor preguntó por un último deseo.
Las hojas del suelo del Talgo
para que las azafatas líen habanos.
Nada para Goicoechea Oriol,
y todas las torres para huir de la vía ancha
como del lápiz negro que pinta
que ya estábamos lejos , ya estábamos lejos,
ya estábamos lejos.