Defiéndete


Al loro, que es demasiado tarde, y tu falda demasiado corta.
Que las miradas, más que mirar, tocan, y te lo van a pillar.
¡Defiéndete! ¡Aléjate!
Llueve y no hay luz en este maldito barrio,
y mi paraguas se rinde agotado.
Una sombra se acerca y susurra que no intente gritar.

¡Defiéndete! ¡Aléjate!
Y entre babas, sucede una vez más.
A los dos años de la pesadilla, siempre tarde llega la noticia, que analizando los hechos, concluyen:
"Tuya es la culpa por provocativa".
¡Lo que hay que ver!