A ningún hombre (Cap. 11: Poder)


A ningún hombre consiento,
que dicten mi sentencia.
Sólo Dios puede juzgarme,
sólo a él debo obediencia.

Hasta que fuiste carcelero,
yo era tuya, compañero,
hasta que fuiste carcelero.

Voy a tatuarme en la piel
tu inicial, porque es la mía,
pa’ acordarme para siempre
de lo que me hiciste un día,
de los que me hiciste un día.

Voy a tatuarme en la piel
tu inicial, porque es la mía,
pa’ acordarme para siempre
y recordarlo to’a la vida,
de lo que me hiciste un día,
de los que me hiciste un día.


Autor(es): ANTON ALVAREZ ALFARO, PABLO DIAZ-REIXA DIAZ, ROSALIA VILA TOBELLA