Con las manos vacías
Triste es llegar, llegar tan ofendido, llegar,
sentirte al fogón y con las manos vacías,
diario es llegar, cargado de tristeza el morral,
nada hacer y sentir, fatiga de ser sin ser.
Voy llegando a ti de mis caminos,
se han secado las fuentes y los ríos,
todo es soñar.
Se han quemado los trigos de ayer,
cansado de buscar y buscar,
la vida es un amargor y así
se van secando los campos,
se van cerrando los ojos,
se va perdiendo el sentido,
se va escapando la vida,
cansado de los cansancios,
se va estrechando el camino,
solo el laurel caminero fiero me alentó.
Y llego a ti vida mía, vencido y tan ofendido,
sin nada para ofrecerte ni nada por explicarte,
tan solo para olvidarte mi corazón malherido
y una lágrima mordida que el miedo volcó.
Autor(es): Chabuca Granda