El 180
Un corazón de madera tengo que mandarme a hacer,
un corazón de madera tengo que mandarme a hacer,
que no padezca ni sienta lo que es querer.
Las estrellitas del cielo y las arenas en el mar,
se parecen a mis penas que yo acabo de cantar.
Un imposible me mata, por un imposible muero,
un imposible me mata, por un imposible muero,
imposible conseguir en imposible que yo quiero.
Dicen que las penas matan, yo digo que no es así,
que si las penas mataran ya me hubieran muerto a mi.