Corazón de palo santo
que tengo de los dos
me cuesta tanto creer
cómo lo nuestro se terminó
No sabes cuánto extraño
acariciar tu piel
y no he podido olvidar
cuando besé tu boca de miel
Aún sigues presente
aquí en mi soledad
tus ojos que tanto amé
fueron mi luz en la oscuridad
Corazón de palo santo
quien pudiera tener
para aguantar el dolor
cuando profundo es mi padecer
Que no te queden dudas
en cuanto a mi querer
llegué a perder la razón
porque te quise hasta enloquecer
Igual que las espinas
filosas del cardón
has penetrado en mi ser
y ahora me hieres sin compasión
Y seguiré cantando
pa remediar mi mal
así como hace el crespín
que se consuela con su cantar