Lamento de lavandera


Allá en la orilla del río,
cantaba una lavandera,
remojando su tristeza,
lavando todas sus penas.

Ella solo se pregunta:
"¡Ay Dios!, porqué me olvidó;
si tanto yo lo quería,
él por qué me abandonó"

Quedó sola con sus hijos,
el marido la dejó
por una mujer más joven
que en la ciudad conoció.

Cada día vuelve al río,
pa’ olvidarse del querer,
y la pobre lavandera
la razón teme perder.

"Yo ando desesperada,
la fuerza ya la perdí.
Mi Dios, quién me protegiera.
Ganas tengo de morir"

El agua escuchó el lamento
cuando su cara asomó,
y en el espejo del río,
su tristeza reflejó.

Allá en la orilla del río,
no canta la lavandera.
La corriente se la lleva,
entre juncos y azucenas;
la corriente se la lleva,
ya muerta sobre sus penas.


Autor(es): Óscar Ruiz