Pero, ¡Ay Amor!


Esta vez creo que he llegado a tocar fondo,
la corriente me ha llevado casi al mar;
mientras tú te enamorabas en la orilla
ya era tarde y yo empezaba a naufragar

¿Qué forma habrá tenido de llegarte?
Yo no sé si es un buen hombre o un ladrón
pero el caso es que prefieres sus abrazos
y yo te escribo para darte la razón.

Pero ay, amor,
qué bien te veo
pero ay, amor,
qué mal, que mal estoy,
sin posibilidad de que este tiempo
retroceda hasta el momento
que empezamos nuestro amor
y así escribir la historia nuevamente
paso a paso y siempre al frente,
a tu lado, corazón.
Pero ay, amor,
qué bien te veo,
pero ay, amor...

El viento se ha llevado mi camisa
y el sol me está abrasando sin piedad,
me queda tu desnudo entre cenizas
y este torpe camino en soledad.

La herida no me duele, sólo llora.
Yo confieso mi egoísmo y que más da
si es que hay otro que se despierta en tu boca
y tu grito no lo oigo, ya no está.

Pero ay, amor,
qué bien te veo,
pero ay, amor,
qué mal estoy,
sin posibilidad de que este tiempo
retroceda hasta el momento
que empezamos nuestro amor
y así escribir la historia nuevamente
paso a paso y siempre al frente,
a tu lado, corazón.
Y esta vez
creo que he llegado
a tocar fondo.