Silencio Cruel


Descansa un alma en el lecho el dolor
Y entre su llanto agoniza un corazón
Misericordia ella clama sin parar
Y en su lamento regurgita un sollozar

No me abandones eterno Consolador
Libra mi alma que agoniza sin tu amor
Tu cruel silencio me consume sin parar
Por la inclemencia de un recuerdo sin borrar

El cruel silencio consume mi piel
Atormenta mi ser
Siento que muero en esta soledad
En mi oscuro andar
Mentiras calle aumentaba el dolor
La desesperación
No me abandones en cautividad
Eterna consolación

Soletudo silentium est in esse
Ubi sempiternus suscitat verba sua
Propter absentiae multitudinis
Orbi infesti et taetrici

La soledad es un silencio en la existencia
Donde el eterno revive sus palabras
A causa de la oportuna ausencia del bullicio
De un mundo hostil y sombrío

Canto aislo, rijo nieblas
Veo ojos que no me pertenecen
Y toco un vuelo que se va de mí
Lo que está en mí se desvanece en si
Que vuelva, que vuelva espero aliento
Que se vaya de mí la atadura temporal
Un grito para si
Un grito al momento
Un aferrarme al si
Al no eterno

Llanto, dolor
En mi interior
Agoniza mi corazón
Me consume mi realidad
Pero aun creo en la verdad

Canto aislo, rijo nieblas
Veo ojos que no me pertenecen
Y toco un vuelo que se va de mí
Lo que está en mí se desvanece en si
Que vuelva, que vuelva espero aliento
Que se vaya de mí la atadura temporal
Un grito para si
Un grito al momento
Un aferrarme al si
Al no eterno

No me abandones eterno Consolador
Libra mi alma que agoniza sin tu amor
Tu cruel silencio me consume sin parar
Por la inclemencia de un recuerdo sin borrar


Autor(es): José Francisco Henríquez