Me falta todavía una poesía


La tarde va cayendo entre mi pena,
el viento con mi aliento se mezcló;
hoy vuelo por el cielo a desprenderme,
sintiendo abrigo de luna llena.

La noche va filtrándose en la escena,
la bruma con su espuma me cubrió;
renuncio a la locura de perderme
en este invierno que silencia el corazón.

Tiempo,
no dejes de latir en mi reloj, ¡te necesito!
Tiempo,
me falta todavía una poesía.
Dame un día,
no puedo contener esta pasión
de mi alma herida.
Vida,
te entrego la alegría de mi verso,
mi universo, mi ternura,
todo el caudal de lo que soy.

El sueño se disfraza de condena,
el frío juega rondas de arrorró,
mi corazón al Sur busca traerme
rumor de esquina, miel de azucena.

Temprano va acabando la faena,
algún cuaderno en blanco se durmió,
me llevo, por si ensayo distraerme,
alguna pluma que dibuje una canción.


Autor(es): Marta Pizzo, Emilio De La Peña