Cuando talla un bandoneón


Disculpen si me doy tono,
pero yo soy como un trompo
si se trata de bailar.
A mi me tira el compás,
y si el compás es de tango
puede ponerle la firma,
que mis pasos son un algo
propiamente de un artista.
¡Que arranque el fueye y verán
las cosas que hago al bailar!

¡Abran cancha, que en el tango
soy un tipo que me agrando!
Brazo firme en la cintura
y de seda la ternura
con que hamaco a la pareja,
que soñando entre mis brazos
blandamente se me entrega,
cuando el tango se hace abrazo
y el abrazo se hace amor.

Yo llevo el tango en el alma,
me arrebato cuando llama
de algún fueye el rezongar.
Porque los pies se me van,
si lo que suena es un tango,
y en el andar de la vida
cuantas veces pasé el trapo,
al florearme en una pista.
Y no me puedo frenar
porque me tira el compás.


Autor(es): Carlos Bahr, Armando Pontier