Don Alberto


¡Mozo lindo! ¡Bien plantado!
de estampa criolla y austera
que en su alma tan solo encierra
dulzura, piedad y amor.
Es el hombre predilecto
perspicaz, altivo y fino,
del gran partido argentino
que es exponente de honor.

¡Nadie olvida al taita lindo!
a ese corazón de criollo
cuya bondad, sin embrollo,
ha sabido destacar.
Y como un eco divino
en el mundanal concierto
el nombre de Don
siempre se ha de recordar.

Entre el decente taitaje
sabe lucir su hidalguía
mostrando su bizarría
cuando llega la ocasión.
Y hoy en mi barrio lo llaman
por su fina aristocracia
el varón hecho de gracia
de alma grande y corazón.


Autor(es): Juan Velich