Vos tenéme cariño


Vos tenéme cariño, vos, vos teném cariño.
Vos tenéme cariño, vos, vos tenéme cariño.

Vos tenéme cariño, si no es todo lo es casi.
Los amantes heroicos no sabrán lo que digo
que es idioma compinche para un claro de cuna
o un dolor de entrecasa, vos tenéme cariño.

Vos tenéme cariño, vos, como el paso al camino
y el camino a lo lejos, vos, vos tenéme cariño.

Tiempo habrá en que mezclemos tu ceniza y la mía.
Pero ahora qué lindo que es saberse querido,
eso ¿viste? que a veces se nos pianta y, de golpe,
uno es uno de veras, vos tenéme cariño.

Ves tenéme cariño, vos como el clavo a su Cristo,
como el Cristo a su muerte, vos, vos tenéme cariño.

Y se vive, está visto que ser uno se aguanta,
que estar solo es apenas recordar el olvido,
ya sabés que se sigue, que ser uno no mata,
que es peor, te desnace, vos tenéme cariño.

Vos tenéme cariño, vos, como el pan a su trigo,
como el trigo al solcito, vos, vos tenéme cariño.

Esa cosa que pasa si tu par de zapatos
y mi par de zapatos velan junto a la cama
preguntándole al piso qué galaxia, o qué tabla,
va a las penas del otro, vos tenéme cariño.

Vos tenéme cariño, vos, vos tenéme cariño.


Autor(es): Horacio Ferrer, Daniel Piazzolla