Peregrina
Qué fuego mueve tu rutina, tu voluntad
Qué terco empeño, qué alado sueño
No tengo luz de tu camino, de tu verdad
Y sin embargo cuánto ansío sumarme ya
A tu porfía, tu travesía
Dame un rinconcito en tu destino
Déjame a tu lado transitar
Qué sol te abriga peregrina, qué dignidad
Te coronó, te dio la vida, trazó tu plan
Quién te dio aquella única estrella
Yo sólo estoy hecho de barro, soplo y sudor
Soy el humano resultado de un día de amor
Más puedo y pido, volar contigo.
Autor(es): Francisco Villa