Ay, corazón no te desboques
Vas a cruzar del Pacífico el Caribe,
Confiesa que al llegar llevas un tango
Y un aire tropical que te revive.
Ay, dulce sombra de mi antigua sombra,
Este soy yo dolido por la ausencia
Y vuelvo hacia este pueblo
Que me nombra y revive
Mi lucha con paciencia.
Ay, corazón, no te desboques tanto
Al alcanzar el cardinal del infinito
Si cruzas este siglo como un canto
Raíz elemental que guarda un grito.
Dame templanza,
Alárgame las alas, dame la luz
Para que en luz yo suba,
Que en un milagro vestiré mis galas
Y pon la proa con destino a Cuba.