
Desbocao
Déjame cara porcelana untarte aceite de avellana,
sabes que no sé esconderme de la mirada de quien me ama.
Hoy la noche está estrellada, vámonos de barra en barra,
agotemos las cervezas como si no hubieran mañana.
Besarte es como beber un vaso de agua fresca,
es como galopar buscando la inconsciencia.
Perseguirte, el corazón martillando a cien
rabioso por comerme el rastro de tu piel.
Soy drogadicto enganchado a las emociones,
un guerrero encarnizado peleando en los colchones.
Eres compañera, patria y mi bandera,
contigo me paso por el forro a cualquiera.
Para el subidón empujar con pasión,
como la primera vez que junto a ti me desboqué,
se hace nuevo el día y continúa la alegría.
Déjame cara porcelana untarte aceite de avellana,
sabes que no sé esconderme de la mirada de quien me ama.
Hoy la noche está estrellada, vámonos de barra en barra,
agotemos las cervezas como si no hubieran mañana.
como si no hubieran mañana.
Reirnos: ¿no sé de qué? Lágrimas cayendo a la tierra,
fumando a la vez, embotada la cabeza.
Alcanzar la sinrazón, cumbre del placer,
locura de los dos que se quieren querer.
No queríamos normas en esta alegría,
las luchas y sueños en compañía.
Empujando del carro haciendo la vida,
construyendo mano a mano nuestra anarquía.
Para el subidón empujar con pasión,
como la primera vez que junto a ti me desboqué,
se hace nuevo el día y continúa la alegría.
Déjame cara porcelana untarte aceite de avellana,
sabes que no sé esconderme de la mirada de quien me ama.
Hoy la noche está estrellada, vámonos de barra en barra,
agotemos las cervezas como si no hubieran mañana.
como si no hubieran mañana, como si no hubieran mañana, mañana, mañana.
Déjame cara porcelana untarte aceite de avellana,
sabes que no sé esconderme de la mirada de quien me ama.
Se fue la noche estrellada con siete golpes de campana,
la penúltima caía cuando el pájaro trancaba.