Amanecí en tus brazos
Amanecí otra vez entre tus brazos
y desperté llorando de alegría;
me cobijé la cara con tus manos
para seguirte amando todavía.
Te despertaste tú, casi dormida,
y me querías decir no sé qué cosas,
pero callé tu boca con mis besos
y así pasaron muchas, muchas horas.
Cuando llegó la noche, apareció la luna
y entró por la ventana.
Qué cosa más bonita cuando la luz del cielo
iluminó tu cara.
Yo me volví a meter entre tus brazos,
tú me querías decir no sé qué cosas,
pero callé tu boca con mis besos
y así pasaron muchas, muchas horas.
Writer/s: José Alfredo Jiménez