Desde la otra calle
Te estremeces, te abandonas
compartis el vino con un espejismo
que te da
desde la otra calle
Y hay una crecida de voces que cantan
te apoyas contra el vidrio y desde la otra orilla
soñás con vivir
hechizos que no conjuras
te salen canción (tristes oraciones)
que murmuras
desde la otra calle
Y hay una mentira de hermosa mirada
que te ofrece sonrisa y con sangre en la lengua
te calma el dolor
entre verso y verso el blanco me invita creer que hay un Dios
entre vaso y vaso la vida me acosa con su sin razón
Y estas vos y estoy yo, separados por un paredón
por la piel, el color, por nuestras banderas y algún amor
y me siento en un bar y te veo pasar en todas las caras que se van
desde la otra calle ves todo tan claro pero no sentís jamas el dolor
