Kany García: «La música tiene que ir de la mano de los tiempos actuales»

Kany García. © Isabel Llano

 

Lanzado en mayo de este año, Contra el viento canta, en una variedad de ritmos, al amor, al desamor; nos invita a aceptar el dolor y la tristeza, pero sabiendo que el llanto nos limpia y que del duelo se sale fortalecido. Es un disco que reivindica el feminismo, el derecho a ser diferente, a no ser discriminados y que nos recuerda una vez más el poder de la palabra, como lo afirma Kany García en el pensamiento que antecede la canción Las Palabras escrita por Fito Páez, tema que cantan ambos para cerrar el álbum.

 

Hablamos con Kany García justamente el día de su cumpleaños y acabando de recibir la noticia de su triple nominación a los premios Grammy Latinos por su disco Contra el viento, que ha venido a presentar a los medios en Barcelona, después de hacer conciertos en Colombia y a punto de continuar la gira de presentación en Nueva York, Puerto Rico y Argentina.

 

Contra el viento es un trabajo lleno mensaje a través de sus once canciones, con ritmos variados y que ha salido cuando aún estabas dando a conocer Soy yo, tu disco anterior. ¿Cómo ha sido esta producción?

 

Ha sido lindo porque ha sido un proceso natural. Uno lanza un álbum que creas con mucha anticipación y con mucho tiempo para pensarlo y después llega otro proyecto que surge en un momento sorpresivamente necesario en la vida, un poco así me pasó con Contra el viento.

 

Empecé a pasar un momento de la vida donde estaba escribiendo mucho y me encontré arropada de esta cantidad de nuevas canciones que quería compartir con la gente. Cuando tienes cosas que compartir a veces los tiempos no siempre son perfectos, a veces dices vamos a esperar, no sé, quizá pude haber esperado dos o tres años para sacar otro disco, pero siento que de aquí a dos o tres años voy a estar en otro lugar donde voy a querer decir otras tantas cosas.

 

¿Es decir que las once canciones de este álbum las venías escribiendo desde el momento en que salió el anterior disco? Porque el lanzamiento de Soy yo fue aplazado porque sucedió el huracán que afectó tanto a Puerto Rico.

 

Estas canciones de Contra el viento empezaron a surgir en el camino. Por ejemplo yo estoy presentando Contra el viento pero ya estoy escribiendo para la próxima producción, uno nunca para, hay procesos creativos que te toman mucho tiempo y hay otros que sin darte cuenta ya tienes un cúmulo de canciones que se acaban convirtiendo en un proyecto, y si tienes la posibilidad de lanzarlo, por qué no hacerlo.

 

¿Cómo lograste reunir a tantas cantantes tan reconocidas como Natalia Lafourcade, Thalia, además de otras personas como Sofía Vergara, para grabar los mensajes que anteceden cada una de las canciones?

 

Ha sido un proceso bien lindo porque fue bien sorpresivo y lleno de complicidad. A muchas de estas mujeres las conocía, por el camino que hemos ido compartiendo, hemos tenido palabras de respeto de unas con otras, y otras que yo veía en entrevistas pero que no las conocía, como es el caso de Sofía Vergara o por ejemplo Thalía, que no las conocía todavía, pero decían cosas que yo pensaba qué bueno sería poder tener eso en lo que va a ser el inicio de una de las canciones.

 

Tuve grandes cómplices que me decían: bueno tú no la conoces pero yo sí la conozco, yo tengo el contacto del manager de ella y esto o lo otro. Y lo más lindo fue recibir el sí de todas, de las que conocía y sorprendentemente de las que no, y que se quisieron sumar a este proyecto y darle un aire muy diferente, porque es un disco entonces muy abrazado por mujeres y en un momento donde la mujer está acaparando mucho la atención por la necesidad que tenemos de vivir en un mundo más igualitario.

 

Eso es verdad porque como en otros discos tuyos hay canciones de amor, de desamor, de problemáticas sociales como la reivindicación de género, como la bachata Soy mía que grabaste en el disco de Natti Natasha. En tu disco también hay la bachata Tu amor es como un río.

 

Cuando hice la bachata Soy mía con Natti Natasha me quedé con la espinita, porque me encantó la experiencia de hacer una bachata y en el momento que la hago para ella decido hacer bachata, porque sentía que era como un punto intermedio donde ella iba a tener la credibilidad por ser dominicana de hacer un tipo de música que es muy del folklore de ella, y yo siendo caribeña de no hacer quizás música urbana como podría hacer yo quizá con Natti.

 

Entonces encontramos ese punto de encuentro perfecto, pero me quedé con esa espinita de que me encantó haberlo hecho y por eso dije: para mí disco quiero hacer también una bachata. ¿Y qué hago? Pues la pongo a ella que presente la bachata, porque era una manera de darle continuidad al proyecto que hice con ella, pero desde otro ángulo, desde otra perspectiva, porque también es una bachata pero un poco más elegante.

 

La bachata que hago para Natti es más Nueva York y la que hago para mi disco es una bachata más a lo República Dominicana y obviamente con una letra más para Kany García.

 

Disfruto mucho eso de que el disco tenga es versatilidad rítmica de sabores, tanto de la cumbia como de la bachata, como del tango, y que de alguna manera vienen un poco a darle a la receta otro tipo de toques y de condimento que quizá no venía haciendo en discos anteriores.

 

El próximo 9 de octubre actuarás en Nueva York, luego vas a tu Puerto Rico natal y después continúas gira en Argentina y has estado en Colombia en agosto pasado.

 

Sí. Estoy que no paramos. Y estoy feliz porque es muy difícil que tú hagas un proyecto y que tenga esta capacidad de romper lo que es cultura y tradición, porque yo siendo puertorriqueña se supone que mi base mayor de fans, en lo que son las redes, sea de Puerto Rico, porque es tu idiosincrasia, es tu idioma, es tu manera de conectar, es la más fácil.

 

Sin embargo mi base de fans más grande es Colombia, no es Puerto Rico. Ahí te das cuenta que la música tiene un potencial tan grande de romper con un sin número de lo que nos han enseñado, que es nuestra idiosincrasia, y cuando eso pasa pues tienes la capacidad de conectar con Argentina, con México, de hacer shows en Nueva York, de venir a España y hacer lo mismo y es lo lindo de la profesión.

 

Además conectas con temáticas por ejemplo sobre la identidad o sobre romper la idea de la pareja en la que una de las partes salva a la otra…

 

¡Qué bueno que hemos roto con eso!, porque al final yo pienso que la música, al menos la música que a mí me gusta hacer y que disfruto, es música que vaya contemporánea con el momento que está viviendo la sociedad.

 

Lo que se hacía antes no lo culpo, porque era la realidad de hace muchos años, porque en los años noventa y dos mil tú escuchabas a una mujer baladista que cantaba: sin ti no soy nadie y me voy a morir si no estás. Hoy escuchamos eso y decimos esa mujer no es vanguardista, no está viviendo bajo la época que estamos compartiendo en este momento donde uno se da cuenta que uno no se va a morir sin nadie, uno se va a morir solo y que al final del camino no necesitamos a nadie, que eso de la media naranja cada vez nos damos cuenta que menos existe.

 

Yo creo que la música también tiene que ir de la mano de eso, la música que hacemos tiene que ir de la mano de los tiempos actuales que estamos viviendo y eso es lo bueno de sacar un álbum tras otro, porque vas aprendiendo y dices esto ya no es así, vamos a hacer una canción que entonces nos enseñe bajo los nuevos términos en los que estamos viviendo como sociedad.

 

Kany García. © Isabel Llano

Yo lo celebro porque precisamente, y tú lo sabes bien, es muy grande la fuerza que puede tener la letra de una canción, y hasta ahora la educación sentimental a través de la música ha sido llevada al terreno de un pensamiento que ahora se ha puesto en cuestión, pero no solamente en lo que respecta a la idea de pareja o de género, sino en temas como el que aludes en Mundo inventado.

 

Claro, Mundo inventado para mí es una canción con la que me siento muy cercana, porque tengo dos cosas cercanas, una es que vivo en los Estados Unidos y vivir en Miami que es vivir con todos los latinos allí, es –como decimos los boricuas- una melcocha, una ensalada mixta de mucha gente muy diversa bajo un gobierno americano, con un presidente que es totalmente anti nosotros, anti latino, y muy en contra de vivir con esa sensibilidad ante las personas que han llegado a los Estados Unidos a hacer bien al país, porque yo no me imagino lo que sería un día sin latinos en los Estados Unidos.

 

Por otro lado lo vivo de cerca porque en México, cuando mi primer disco, yo me tuve que ir a vivir casi un año a México porque estaban pasando demasiadas cosas lindas y me pasaba yendo y viniendo y acabé quedándome allí por un rato y viví muy de cerca lo que era cantidades inmensas de familiares que tenían que dividirse, romperse porque las leyes de alguna forma no jugaban a favor de los individuos y tenían la necesidad, pero ahora vemos un México que cada vez ve más complicado el poder cruzar frontera, volviendo al presidente, por un presidente que lo hace cada vez más difícil y lo expone cada vez más en su campaña.

 

Una canción como Mundo inventado para mí es una canción muy cercana a cosas que he vivido y me es fácil contar.

 

Volviendo a los mensajes de mujeres que anteceden cada canción, ¿dónde encontraste esas palabras de Mercedes Sosa, de dónde rescataste ese mensaje?

 

Ese mensaje lo encontré buscando cosas de ella, porque Mercedes es alguien que en mi música siempre ha estado, yo creo que cualquier persona que agarra una guitarra y empieza a sacar canciones busca siempre a estos pilares de la música latinoamericana y para mí Mercedes era eso y me aprendía sus canciones, me buscaba los acordes, todo, y quería que estuviera y encontré esto en el último trabajo de ella, se llama Cantora, es un CD a la vez que un DVD y me hizo mucha gracia por la manera graciosa en que ella contaba a alguien que estaba en la casa de ella y le dice ¡cuántos premios que tienes!, y ella no le daba valor, no porque no significaran algo sino porque le daba valor a las cosas que realmente eran importantes.

 

En la edición que hago corto el comienzo de donde venía la conversación, porque ella decía antes: "ustedes ven todo esto que tengo aquí, todos estos premios, hay mucha gente que canta mejor que yo, y lo que hace diferente" y ahí es lo que agarro yo, "lo que hace que yo no sea una cantora común es que yo pienso, pienso en los seres humanos".

 

Para mí eso era maravilloso porque yo también creo que muchas cantan mejor que yo, que muchas tocan guitarra probablemente mejor que yo, muchas escriben mejor que yo, definitivamente, sería una insensata si no pensara así, pero sí creo que lo que ha definido a muchos artistas a tener credibilidad y a conectar con la gente es exactamente eso, es sentir que nosotros no somos otra cosa que a la vez trabajadores igual que la gente del pueblo y que la gente pueda encontrar imagen en las canciones, es muy triste que la gente solamente pueda encontrar que en sus momentos de amor y desamor hay música para ellos, pero es que vivimos tantas otras cosas que cómo no va a haber música para tanta injusticia y para tantas cosas que estamos viviendo y eso es lo que creo que hace que un artista tenga la capacidad de trascender mucho más allá de lo que son canciones que también son necesarias pero que no representarán el todo de la vida de los seres humanos.

 

Este mensaje que dices retomando a Mercedes Sosa al igual que el mensaje de canciones como Mundo inventado creo que conectan mucho con lo que aquí en España experimenta el colectivo grande de latinoamericanos que vive en este país, aunque no solamente aplica a España.

 

Sí. Yo lo siento, cuando voy a todos lados, en todos lados hay venezolanos porque tristemente han tenido la necesidad, hablo de Venezuela porque creo que es algo muy latente en toda Latinoamérica, pero encontramos también países que de alguna manera han cobijado mucho al latino, como es España, Argentina también, porque acabo de venir de allá y sentía lo mismo también, voy a los conciertos y conozco a gente de Colombia, Ecuador Venezuela, Centroamérica, de todos los que han venido a trabajar, porque no es otra cosa, no es que vienen a vivir debajo un puente, la gente lo que quiere es echar hacia adelante, enviar dinero a sus familiares, es todo eso, entonces uno como latino también se siente orgulloso de encontrarse a todos en estos lugares que están viniendo a echar raíces y mostrar que al final yo creo que las fronteras son una cosa tan boba y tan efímera al mismo tiempo y que ojalá los gobiernos cada vez abrieran más las puertas para que la gente tenga las posibilidades.

 

Nadie se quiere ir de su país, uno se va porque tiene razones necesarias, de vida, de comida, de vivienda, de seguridad, de tantas cosas y si eso va a suceder pues claro que es bonito que existan gobiernos que puedan hacer un poquito más fácil al extranjero el poder tener la posibilidad de echar hacia delante y echar raíces también.

 

Incluso si te quieres ir no por necesidad sino por opción libre, así como la gente de Estados Unidos o España van donde quieren ir.

 

Claro, yo misma me fui a los Estados Unidos porque quise, porque sentía que me cansaba de vivir en una isla, que la amo y adoro, pero que tenía que estar montada en un avión y nunca había vuelos directos a ningún lado y dije bueno, no es que Miami sea mi lugar favorito, amo mi país, pero es mi manera de tener un poquito más de calidad de vida, pero me fui por opción, hay mucha gente que se va por opción, y esa gente también viene a echar hacia adelante.

 

¿Cuál es el tema de Contra viento al que más le apuestas?, ¿te atreverías a decir alguno?

 

No. De apostar le apuesto al álbum, porque no sabría una canción, porque es un disco que es muy disco. Si dijera una canción que representa el álbum, no sé si va a ser sencillo, pero que representa el espíritu del disco es Así voy yo, porque cuenta la cara de todos aquellos que en algún momento hemos sido discriminados, creo que todos y todas en algún momento hemos vivido el que alguien mire hacia un lado y no nos quiera ver, o que alguien mire hacia un lado porque no quiera escuchar porque no le gusta nuestro acento, no le gusta nuestra cara, no le gusta lo que decimos, lo que hacemos, por eso me caso con esa canción.