Montse Castellà y Guiem Soldevila: Complicidad poética

Montse Castellà y Guiem Soldevila. © María Gracia Correa

Un cartel obra de la ilustradora Paula Bonet decoraba el fondo de la escena poética y musical en la Casa de Cultura de Sant Cugat del Vallès (Barcelona), 15 Festival nacional de poesía de Sant Cugat, Montse Castellà y Guiem Soldevila sumaron sus canciones al universo poético en lengua catalana que difunde esta gran celebración de la cultura año tras año. Más allá de sus recorridos artísticos personales y en solitario, en el escenario se iban a fusionar dos voces con carisma que estrenaban colaboración artística en este concierto especial, la voz de la tortosina Montse Castellà y la del menorquín Guiem Soldevila, la cançó en las Tierras del Ebro junto a la cançó en Menorca.

Dos cantautores acostumbrados a enriquecer su obra con la palabra poética de referentes próximos que en sus diversos trabajos discográficos han ido haciendo suyos, verso a verso, poemas a los que suman intención y emoción con su voz y con su música, colaborando en su labor de difusión. Un día no muy lejano los dos artistas se encontraron, se reconocieron y decidieron emprender un recorrido común puntual por la poesía y la lengua que les une, ella desde su tierra-río, él desde su tierra-isla, con el Mediterráneo y la poesía como nexos de unión, un viaje poético de Nura a Ilercavònia y viceversa.

Simbólicamente y a través de la poesía contemporánea ambos cantautores funden hoy sus voces y sus sensibilidades reivindicando como escenario sus tierras del alma, Guiem desde su Menorca natal, isla bautizada como Nura o tierra de fuego por los fenicios, así se tituló también un poemario del poeta menorquín Ponç Pons al que Guiem Soldevila dedicó un disco en 2011. Por otra parte, Montse se adentra en el arte desde su mítica Ilercavònia, tierra fronteriza habitada antaño por los iberos alrededor de las tierras bajas del Ebro, ese río que hoy llena el corazón y el día a día vital de Montse Castellà, un río que reivindica y del que se hace eco en cada meandro recorrido y sentido personalmente en cercanía.

Bendita poesía que hermana voces y sensibilidades artísticas como las de Montse Castellà y Guiem Soldevila en un espectáculo en directo, guitarra en mano, lleno de emoción y belleza, las variantes lingüísticas del catalán de Menorca y del Delta del Ebro más próximos que nunca, el acento poético y la música dibujaron fielmente la fuerza, el simbolismo y la intención de la palabra de los poetas escogidos.

Guiem Soldevila. © María Gracia Correa

Inició la noche Guiem Soldevila interpretando temas de su repertorio que incluyó en su más recinte disco  Amoramort publicado en 2014, con su voz clara y con fuerza cantó Escriu-me (Sònia Moll) y La lluna sortirà després del sol (poema tradicional africano), de su anterior disco Nura (2011) dedicado a un poemario de Ponç Pons interpretó Suor de calç (Ponç Pons) y Dona llegint una carta vora la finestra oberta (Ponç Pons).

Llegó el turno de la voz de río vivo de Montse Castellà dando el alma por sus queridos poetas, cantó La barca (Jesús Massip): “L'Ebre és un bell riu, l'Ebre és un vell riu, sempre té coses noves a contar-te” (El Ebro es un río bello, el Ebro es un viejo río, siempre tiene cosas que contarte) y a continuación el tema Lo meu poble està a la cantonada d'un mapa (de Gerard Vergés y Jesús Massip), ambas canciones pertenecientes a su disco Géminis (2011). Del poeta Miquel Martí i Pol cantó por vez primera un poema recién descubierto por la cantautora: Ara és demà (Miquel Martí i Pol) y cerró su aportación particular con És circular el temps del propi enyor (Zoraida Burgos, Jesús Moncada, Carles Riba i Rosa Regàs), otro tema estrenado en esta noche con fragmentos de poemas de esos grandes autores.

Sumando acentos y multiplicando su talento juntos cantaron És com un miracle (Gerard Vergés, Jesús M. Tibau y Desideri Lombarte) del disco L’escriptor inexistent (2007) de Montse Castellà  y Godotus (Ponç Pons): “...el món que jo estim té les costes d'una illa” (el mundo que yo amo tiene las costas de una isla...),  grabado en Nura (2011) de Guiem Soldevila, en este conjunto mostraron su buena sintonía vocal y su complicidad.

Tres regalos finales con los que ambos artistas reivindicaron las figuras de tres maestros de la canción de autor imprescindibles, muy hermosas versiones que los presentes disfrutamos, para empezar compartieron al unísono Cançó a Mahalta (poema de Màrius Torres con música de Lluís Llach): “Corren les nostres ànimes com dos rius paral·lels, fem el mateix camí sota els mateixos cels” (Corren nuestras almas como dos ríos paralelos, hacemos el mismo camino bajo los mismos cielos...) , en este tema nos contagiamos de la emoción en la mirada de Guiem Soldevila que lo interpretaba por primera vez en público. A continuación, Montse Castellà nos habló de su admiración y cercanía a Paco Ibáñez, ambos nos cantaron las delicadas Palabras para Julia (poema de José Agustín Goytisolo con música del inmenso Paco Ibáñez), cerraron la noche con un hermoso Hallelluyah, la inmortal obra de Leonard Cohen.

En ocasiones las noches de canción y poesia son sensillamente así, inesperadamente irrepetibles y plenas en emoción.

El 7 de noviembre Castellà y Soldevila volverán a compartir este espectáculo con el público de Sant Carles de la Ràpita (Centre Cultural El Maset, 20 h.), un directo que merece ser disfrutado en muchos otros escenarios, acento poético en  buena compañía, sumando talentos. 

Montse Castellà. © María Gracia Correa