Donan 216 fotografías inéditas de Víctor Jara

Víctor Jara en Casa de la Cultura de Ñuñoa (1968) con una guitarra Telesforo Julve, fabricada en Valencia. © Hernán Quintana|Archivo de la Escena Teatral UC

El reciente descubrimiento y donación de 216 fotografías inéditas de Víctor Jara, capturadas por Hernán Quintana entre 1967 y 1968, ha sacado a la luz un valioso archivo visual que documenta momentos íntimos y significativos en la vida del cantautor chileno. Estas imágenes, que han permanecido ocultas durante más de cinco décadas, ofrecen una nueva perspectiva sobre la figura de Jara, retratándolo en escenarios que van desde su entorno más personal hasta los paisajes de su infancia en Lonquén.

La preservación de estos negativos en el Archivo de la Escena Teatral de la Universidad Católica de Chile representa no solo un acto de conservación cultural, sino también una oportunidad para redescubrir el legado de uno de los artistas más influyentes de la historia reciente de Chile. 

El archivo fotográfico de Hernán Quintana, que contiene 216 negativos inéditos de Víctor Jara, representa un valioso testimonio visual de la vida y el entorno de uno de los íconos más importantes de la cultura chilena. Estas fotografías, capturadas entre 1967 y 1968, ofrecen una visión íntima y única de Jara, tanto en su faceta personal como en su contexto social, revelando aspectos menos conocidos de su vida y obra.

Hernán Quintana, astrónomo y profesor emérito de la Universidad Católica de Chile, desarrolló su interés por la fotografía en su juventud. A pesar de ser autodidacta, logró capturar con su cámara momentos trascendentales, que ahora adquieren un significado histórico y cultural invaluable.

Víctor Jara con un poblador en Lonquén (1967), sesión que posiblemente inspiró la canción «El lazo». © Hernán Quintana|Archivo de la Escena Teatral UC

Estas imágenes donadas ahora al Archivo Teatral UC, fueron tomadas durante tres sesiones, en distintos lugares significativos para Víctor Jara: la casa de Quintana, el pueblo de Lonquén y la Casa de la Cultura de Ñuñoa.

En Lonquén, donde Jara pasó gran parte de su infancia, las fotografías reflejan la conexión profunda del cantautor con su lugar de origen. Estas imágenes no están centradas en Jara como figura central, sino en los paisajes y personajes del pueblo, mostrando a un Víctor Jara que busca honrar y documentar a la gente y el entorno que lo moldearon. Quintana, a través de su lente, capturó a Jara en su esencia más pura, saludando y conversando con los habitantes locales, en un acto que revela la modestia y el compromiso del artista con sus raíces.

La segunda serie de fotografías fue tomada en la casa de Hernán Quintana, donde Jara, en un ambiente más íntimo, es retratado jugando con los contrastes de luz y sombra que se filtraban a través de una ventana. En estas imágenes, el cantautor aparece en poses espontáneas, con su guitarra, reflejando momentos de introspección y creatividad. La sencillez de estas tomas resalta la faceta más humana de Jara, alejada de la imagen pública que muchos conocen.

La tercera sesión se realizó en la Casa de la Cultura de Ñuñoa, un lugar emblemático para Jara, donde impartía talleres de teatro y folklore. En estas fotografías, se le ve con un chaleco negro y jeans, en un entorno que mezcla la naturaleza con la arquitectura, mirando a la cámara o esquivando el lente, en una serie de 120 imágenes que capturan su intensidad actoral e interpretativa. Estas fotos muestran a Jara en plena acción, interactuando con su entorno de una manera que refleja su pasión por el arte y la cultura popular.

Víctor Jara en Casa de la Cultura de Ñuñoa (1968). © Hernán Quintana|Archivo de la Escena Teatral UC

De estas imágenes, solo algunas fueron publicadas antes en la revista Paula en 1971 y en la carátula de un disco, pero la mayoría ha permanecido inédita hasta la reciente donación al Archivo de la Escena Teatral de la Universidad Católica. Este archivo ha sido resguardado durante décadas por Quintana, quien supo reconocer su valor tanto documental como emocional, al capturar un momento crucial en la historia cultural de Chile.

La importancia de estas fotografías radica no solo en la figura de Víctor Jara como icono cultural, sino también en el contexto en el que fueron tomadas. Reflejan un período de cambios sociales y políticos en Chile, y documentan la vida cotidiana de un artista comprometido con su pueblo y sus ideales. Las imágenes de Lonquén, en particular, destacan por su valor histórico, ya que muestran un entorno que sería escenario de acontecimientos trágicos en el futuro, tras el golpe de Estado de 1973.

La conservación de estos negativos en el Archivo de la Escena Teatral UC asegura que estas imágenes no solo se preserven, sino que también se pongan a disposición de investigadores, académicos y el público en general, para que puedan estudiar y apreciar la vida y obra de Víctor Jara desde una perspectiva nueva y profunda. La donación de Hernán Quintana es, por tanto, un acto de memoria y preservación cultural, que permite a las futuras generaciones entender mejor el legado de Jara y el contexto en el que vivió y creó su obra.

Víctor Jara cantando y tocando guitarra en la casa de Hernán Quintana (1967). © Hernán Quintana|Archivo de la Escena Teatral UC