Tinto es el notable nuevo disco del dúo mendocino de folclore Orozco-Barrientos que se ha lanzado la pasada semana.
Télam - La espera de cinco años por volver a apreciar un álbum del dúo que una década atrás recuperó los ritmos cuyanos para la gran escena musical argentina, valió la pena.
Con Tinto, la dupla Raúl "Tilín" Orozco-Fernando Barrientos regala, en su tercer disco, el trabajo más audaz y acabado para sintetizar y proyectar las búsquedas estéticas de sus inspirados integrantes.
Combinando con sapiencia el conocimiento de las raíces con sus propias inquietudes sonoras y estilísticas a partir de la guitarra y la voz, Orozco-Barrientos profundizan un discurso propio para asumir una música cuyana que abreva en las tradiciones y también se dispara sin pedir permiso ni ofrecer disculpas.
En la senda de Celador de sueños (2004) y Pulpa (2008), la propuesta de Tinto es francamente embriagadora al combinar memorias y audacias, sutilezas y golpes al mentón y ofrecer un fresco social tan inquietante como alejado de cualquier slogan.
La fresca hondura de este trabajo, producido entre Gustavo Santaolalla y Raúl Orozco y con la coproducción de Aníbal Kerpel, trasciende las fronteras sonoras cuyanas y aparece como un formidable ejemplo acerca de cómo hacer equilibrio entre tradiciones y modernidad.
Cuecas y tonadas, surcadas por aires diversos, y también otros ritmos y géneros conviven en 15 canciones donde es prácticamente imposible hallar algún tema "de relleno".
La mirada campesina acerca de viñedos y cosechas aparece retratada con inspirado dolor en Bajo los sauces ("Solo espera los días/siempre en la cosecha/Solo espera los días/luego de este sol") y Cara sucia ("Mi piel está quemada/de tanto cosechar/de chico me enseñaron/que no podía hablar").
La cuestión social irrumpe de la mano de Pelota de trapo, del burlón consejo de Tranquilo compadre, de la desolación de la vendedora de flores Rosita y del sorprendentemente rockero Chilenitas ("Si navegar es preciso/es mejor que sea con vino"), todos ratificando el supremo presente vocal de Barrientos.
Cuestiones amorosas donde el romanticismo no es una suma de sensiblerías, se anotan a la hora de Deambula un amor y El amor puede salvar.
Si esa artillería propia firmada por el dúo no bastara para construir un gran trabajo, la selección de clásicos "a su manera" redondean y explican aún más el espíritu que anida en estos artistas y que explota en Tinto.
Las tonadas reunidas en Quien te amaba ya se va, tomando recopilaciones de Alberto Rodríguez y sumando las voces de Liliana Herrero y Teresa Parodi, es el primer hallazgo de los cinco que completan el registro.
La picante obra de Félix Dardo Palorma aflora en La refranera y Póngale por las hileras, es exquisita la versión de la cueca Tordo viejo (de Laborda y Fruttero) cantada por "Tilín" y se cierra con el motivo popular anónimo de la Tonada del arbolito.
Junto con la edición del álbum, se anunció que la presentación de Tinto tendrá lugar el sábado 7 de septiembre en la sala porteña La Trastienda.
La ciudad de Barcelona rinde tributo al cantautor Luis Eduardo Aute con una pieza artística instalada en la plaza Rovira i Trias del barrio de Gràcia, lugar donde el artista pasó parte de su infancia y al que dedicó una canción en 2010.
La cantautora colombiana presenta un nuevo trabajo grabado en vivo en un patio de San Telmo, como homenaje íntimo a la ciudad de Buenos Aires, donde interpretó cinco canciones en formato acústico junto a un trío de músicos.
Notas legales
Servicios
• Contacto
• Cómo colaborar
• Criterios
• Estadísticas
• Publicidad
Síguenos