La escritora, autora e intérprete María Elena Walsh recibió ayer, en su casa, la medalla del Bicentenario, la segunda de las 200 distinciones que se entregarán a distintos ciudadanos e instituciones por su contribución a la sociedad.
María Elena Walsh recibió ayer, en su casa, la medalla del Bicentenario, premio que fue instituido por el programa Puertas del Bicentenario del gobierno de la ciudad de Buenos Aires y que coordina Carlos Ares. Consta de una medalla diseñada por el artista Antonio Pujía, y el primero en recibirla fue Quino, el autor de Mafalda.
"En su vida, María Elena ha demostrado una gran calidez, decencia y honestidad. Nosotros nos reconocemos en ella, y es una de esas personalidades que nos demuestran que somos mejores que la vida que llevamos", expresó Ares, al entregarle la distinción a la escritora en su casa.
Walsh incursionó en diversos géneros: folklore (tuvo un dúo con Leda Valladares en los años 50), música y libros para chicos (El reino del revés, Manuelita, Canciones para mirar) y, más tarde, composiciones para adultos (Como la cigarra, Serenata para la tierra de uno); escribió poemas, ensayos, guiones para cine y TV, y memorias. Algunos de sus libros son Desventuras en el País-Jardín de infantes, Novios de antaño y Fantasmas en el parque.
Durante la ceremonia privada, Ares afirmó que "las medallas son como una luz que encendemos para recordarnos, en medio de las dudas e incertidumbres, que hay personas e instituciones que nos inspiran a llevar una vida mejor".
El trovador cubano Silvio Rodríguez dará inicio a su próxima gira latinoamericana con una presentación pública y gratuita en la escalinata de la Universidad de La Habana, el 19 de septiembre a las 19:00. El histórico enclave volverá a convertirse en escenario de la Nueva Trova, en un evento que marcará el punto de partida de una serie de conciertos por cinco países de América del Sur.
La cantautora mexicana Natalia Lafourcade actuó en solitario ayer domingo en el Liceu de Barcelona en el marco del Suite Festival, en un concierto cargado de emoción radical, depuración estilística, mestizaje sonoro, dramaturgia íntima y canción de autor en estado puro. Sílvia Pérez Cruz fue su invitada en sensible abrazo musical.
Notas legales
Servicios
• Contacto
• Cómo colaborar
• Criterios
• Estadísticas
• Publicidad
Síguenos