Mi mulata


Ay, es mi mulata un terrón
de azúcar canela hecho
que arrimándoselo al pecho
quita el mal de corazón.
Y ella vive con el don,
y a ningún hombre maltrata
y si le llaman ingrata
es más dulce que la uva
del azúcar que hay en Cuba,
es la mejor de las mulatas.

Contigo me caso, indiana,
si se muere tu papá
díseselo a tu mamá,
hermosísima cubana.
Tengo una casa en La Habana
destinada para ti
con el techo de marfil
y el piso de plataforma
para ti, blanca paloma,
traigo yo la flor de lis.

Quiero platicar contigo
debajo del cocotero
para que tú sepas,
linda trigueña mía,
cuanto te quiero.


Autor(es): Hermenegildo Montes, Juanito Valderrama