Hombres de Adamantio
Entrar cada día
a entrañas perdidas
dejando de lado
la luz del pasado
con almas amigas
de un mismo destino
todos decididos
a en la oscuridad no caer.
Llegamos a un bizarro lugar subterráneo
miramos de frente el peligro existente
no nos inmutamos por la travesía
que día a día consume nuestras vidas
Este es el destino que nos ha tocado
por eso los tengo siempre a mi lado
somos los valientes de un mundo alejado
somos esas almas que un dios ha marcado.
Armonizando y confrontándonos
Con nuestra dura realidad
no sabiendo cómo, que o quien..
nuestra vida absorberá
Lóbrego que cubre
la mente forzada
a olvidar el recuerdo
de la alborada
Esperanza infringida
por nuestra agonía
como aire impalpable
oscuro e inefable
Entre labios suspiros inacabados
soportando el peso con esfuerzo inhumano
dejamos la esencia de nuestra existencia
por lo que atrás con vehemencia abrazamos
Este es el destino que nos ha tocado
la esperanza no hemos abandonado
somos los valientes de un mundo alejado
somos esas almas que un dios ha marcado.
Armonizándonos
Autor(es): Iván Fernando Condori Oviedo