No digas a nadie
No digas a nadie que ya no te quiero,
que es lo mismo que si tú negaras
que hay sol y que hay cielo.
Puñales que me claven dentro del alma
no han de dolerme, niño, si tú los clavas
del mar, el agua amarga, dulce supiera
si entre tus manos, vida, yo las bebiera
candelas que me acerquen, junto a la cara
han de abrasarme menos que tu mirada, que tu mirada.
No digas a nadie que yo te desprecio
que tú sabes, que tienes la culpa,
que viva muriendo.
Del mar, tú eres las olas, las rocas soy,
tú cambias por momento, yo firme estoy,
yo soy pálida luna, tú sol que ciega,
mi brillo se oscurece cuando tú llegas,
yo soy la hojilla seca, tú eres el viento,
yo sigo tu camino y no te encuentro, y no te encuentro.
Autor(es): Antonio García Padilla, Juan Mostazo