Vitrales


Como si aún estuvieras aquí,
quiero llenar mi casa de tu sonido,
con el que he guardado,
impregnado en las paredes.

Cuando los ventanales eran de oro
si tú los abrías para que entrara, ardiente, el amor.
Cuando el tiempo no era tiempo
sino un cuerpo enredado en tu cuerpo.

Como si aún estuvieras aquí,
yo me imaginé mi casa con tu grito,
con la luz que he amado
entre los vitrales de tu recuerdo.

Cuando todo el placer era lluvia,
que limpiaba la basura del corazón del mundo.
Cuando el tiempo se desvanecía
y sólo quedaban las imágenes de tu vacío.


Autor(es): Jordi Bilbeny, Marina Rossell