Polonesa
Buenas noches, amada mía,
he de irme a lo lejos por el bosque;
no salgas a la ventana
que tus ojos me causarán dolor.
Amor mío, has de comprender
que los árboles me están llamando,
que no me puedo quedar en tu casa,
me esperan mis compañeros.
No me puedo quedar en tu casa,
me esperan mis compañeros.
Luna triste entre las ramas
de la quietud del bosque,
oigo como ladran los perros
pero, amor mío, no tengas miedo.
Cuando haya terminado la guerra,
un bonito día de abril,
volveré a tu casa
y pasaremos juntos la noche.
Volveré a tu casa
y pasaremos juntos mil noches.
Si no llego en primavera,
tú, hermano, tendrás que labrar,
y mi cuerpo cubierto de tierra
nutrirá nuestros campos.
Una mañana al despuntar el alba,
coge un haz de trigo
y abrázalo, amada,
apriétalo hasta hacer pan.
Y abrázalo, amada,
soy la vida de este trigo.
Autor(es): Popular polaca