Boleto de empeño
arañando de esos sueños, que desaparecen 
voy prendido al vagón, de la ilusión 
buscando sin rumbo, alguna estación 
Mordiendo el anzuelo como tantas veces 
peleando en la red donde todo padece 
voy prendido al sabor de ese viejo licor 
que sabe bien amargo, pero es el mejor. 
Y tu, adonde estás hoy? 
y tu, adonde vas hoy? 
sería mejor, con el boleto en mano no perder el convoy. 
Empeñando el corazón, una y mil veces 
arañando esos sueños que desaparecen 
voy prendido al vagón, de esa vieja ilusión 
que sabe bien amarga pero es la mejor.