Por mi culpa
por mi grandísima culpa,
tiré mi chaqueta al barro
para que nada te embarre
y puse ventiladores
porque te faltaba el aire.
Por mi culpa,
por mi grandísima culpa,
le di metros a la cuerda
para ensancharte el paisaje
y que no vayas diciendo
que tu vida es una cárcel.
Yo no soy tu carcelero,
nunca he tenido las llaves
porque en vez de ser tu dueño
fui el perrito que te lame.
cuando uno quiere estar solo
coge la puerta y la abre
o se va por donde el humo
y no anda jodiendo a nadie.
Por mi culpa,
por mi grandísima culpa,
se me aparta hasta mi sombra
cuando pongo el pie en la calle
y sé que tras las cortinas
se hacen cruces las vecinas.
Por mi culpa,
por mi grandísima culpa,
me pincho y no sale sangre
de tanta como chupaste.
Parece que te estoy viendo
llevándome por el talle.
Camino del matadero
para venderme por carne
y luego harás con mis huesos
botones pa' abotonarme.
Ya me lo dijo tu madre
cuando me habló de tu padre:
no eches caviar a los cerdos
que no saben “apreciarle”.
Por mi culpa,
por mi grandísima culpa,
le dije al señor de negro
no hay más cera que la que arde,
me dio siete puñaladas
pero yo soy el culpable.
Yo fui a por ella primero
porque siempre he sido un necio
y el cuchillo quedó en medio
del tortazo que me dieron.
No le alargo más el cuento
la quiero porque la quiero
y a la puerta de la cárcel
me voy desde este momento.
Por mi culpa,
por mi grandísima culpa...
Writer/s: Víctor Manuel San José