Y hubo alguien
por hablar de los dos y salir a cenar.
Tal parece que yo te hice falta de más,
que no fuiste feliz con tu otra mitad.
De repente te da por volver a sentir,
quién es el que en verdad sabe hacerte feliz.
Pero se te olvidó que al marcharte de aquí
yo quedé igual que tú, libre para elegir.
Y hubo alguien
que se encargó de darme todo cada tarde,
que se moría por llenarme de detalles,
oh, y palabras amables.
Sí, hubo alguien
que mientras tú vivías tu vida muy aparte,
se encargaba de la mía con coraje,
y logró conquistarme.
Y a ese alguien,
una noche de locura interminable,
le entregué mi cariño, mi cuerpo, mi alma,
mi mente y mi ser, como tú ya lo sabes.
De repente te da por romper a llorar,
por decir que jamás me pudiste olvidar.
Pero se te pasó, que al marcharte de aquí,
yo quedé igual que tú, libre para elegir.
Y hubo alguien
que se encargó de darme todo cada tarde,
que se moría por llenarme de detalles,
oh, y palabras amables.
Sí, hubo alguien
que mientras tú vivías tu vida muy aparte,
se encargaba de la mía con coraje,
y logró conquistarme.
Y a ese alguien,
una noche de locura interminable,
le entregué mi cariño, mi cuerpo, mi alma,
mi mente y mi ser, como tú ya lo sabes.