Ya no te quiero


I
Píeme que coja el sol con las manos,
píeme que cuente la arena der má,
pero no me pías, por tu salusita,
que de ti me tenga que desapartá.
Caenas de hierro
por ti yo sería capaz de rompé;
la sangre y la vía,
que tú me pidieras, habrías de tené.
Pero no me pías
que de ti me orvíe, gitana mi arma,
que eso no pue sé.
Y ante su doló
yo me eché a reí
y sin compasión
fui y le dije así:
Estribillo:
“No te quiero, gitano,
ya no te quiero
y me debes de orviá.
qu’er queré viene de gorpe
y como viene se va.
“Fuiste pa mi lo primero,
te camelé de verdá,
pero ya no te camelo
y no sé
por qué será.
“No te quiero, gitano,
ya no te quiero
y me tienes que orviá”.
II
De mi vera un día pa siempre te fuiste;
mis palabras fueron cuchillos pa ti,
y sangrando el arma, con pena dijiste:
“Pué sé que argún día te acuerdes de mi”.
El tiempo ha pasao
y tu profecía por fin se cumplió;
que tú te has marchao
y la que hoy te busca, con ducas, soy yo;
que el recuerdo tuyo
lo llevo clavao, gitano del arma,
en mi corazón …
Y al verme llorá
te echaste a reí
y sin compasión
me dijiste así:
Estribillo:
“No te quiero, gitana,
ya no te quiero
y me debes de orviá;
qu’er queré viene de gorpe
y como viene se va.
“Fuiste pa mi lo primero,
te camelé de verdá,
pero ya no te camelo
y no sé
por qué será.
“No te quiero, gitana,
ya no te quiero
y me tienes que orviá.