Murciélagos


Ya se marchitó otra flor de plástico,
ya no se hacen con amor,
con sangre del corazón,
a la luz de la luna con música de dolor.

Muy lejos, donde ya no se puede viajar,
fabricaban tiempo exclusivamente para perderlo,
con opción para detenerlo.
Nada que ver con nuestro tiempo muerto.

Hace mil años en un bosque encantado
lleno de almas penando, que hoy sobrevuelan el asfalto.
Ya no quedan murciélagos
en las cuevas ni en los acantilados.

Hace mil años en un bosque encantado
lleno de almas penando, que hoy sobrevuelan el asfalto.
Ya no quedan murciélagos
en las cuevas ni en los acantilados,
ya no quedan murciélagos
en las cuevas del río subterráneo.