Vidalita
porque va por dentro.
Y en ella te canto, vidalita,
el dolor que siento.
Ya se secó el arbolito
donde cantaba el pavo real.
Ya se murió mi china querida,
ya no la vuelvo a ver más.
Ya se secó el arbolito
donde cantaba el pavo real.
Anoche mientras dormía
del cansancio ,
no sé qué sueño
cruzó por la mente mía,
soñaba que te veía
y que me estabas mirando
y yo te estaba contando
mi vida triste, muy triste,
y te desapareciste
al despertarme llorando.
¡Ay! un cañaveral,
ya no hay remedio
para mi mal.
Writer/s: Mayte Martín