La palabra


A veces,

en mis ratos de soledad,

convoco a la palabra

y la hago danzar a mi voluntad

pudiendo hacer que sea tan veloz

como el pestañeo de un ojo

o tan lenta,

como un recuerdo desvaneciéndose.

Puedo hacer que te divierta

o al contrario,

hacer que te sumerja

en la mas cruda de las tristezas.

Depende del momento,

de la situación,

puede ser tan dulce como tu cara

o tan retorcida

como la mente de un asesino en serie

sabes?

Porque una palabra a veces

vale más que 1000 imágenes sin sentido

recuerda:

no hay arma mas mortífera

que una palabra brotada de un corazón noble

y un par de huevos que la respalden.