Corazón, canta y no llores
no llores que los dolores
hay que espantarlos bailando
pa’ que no sufra el charango.
Manos, toquen instrumentos,
instrumentos y lamentos,
y echen abajo la puerta
si se nos niega la vuelta.
Cantando paso los días,
el día con su quebranto
y es que el dolor se me alivia
solamente cuando canto.
Arriba con el otoño,
con el otoño más frío.
Abajo con el verano
si están lejos mis hermanos.
Writer/s: Isabel Parra