¡Que se vayan!
Que se vayan los que obscurecen
nuestras madrugadas,
los que matan nuestros sentimientos
con rancias palabras,
los que hablan de amor mientras
sonrientes te apuñalan,
los que roban nuestro corazón y
siempre nos engañan.
Que se vayan los que crean
fronteras para luego cerrarlas,
los que llegan siempre al poder y
luego nos estafan,
los que por el color de una piel
prejuzgan y apartan,
los que hablan de libertad mientras
nos amenazan.
Que se vayan, que se vayan...
¡Que se vayan!
Que se vayan los que por dinero no
hacen asco a nada,
los que buscan comprar voluntades
como compran armas,
los que hacen de la economía su
vaca sagrada,
los que intentan buscar el amor
siempre a cambio de nada.
Que se vayan los que un día
vinieron para gobernarnos,
los que se aferran al poder durante
largos años,
los que juegan con cartas marcadas
e intentan ganarnos,
los que hablan de vida y de fe para
ejecutarnos.
Que se vayan, que se vayan...
¡Que se vayan!
Que se vayan los que hablan "ex
cátedra" y siempre la cagan,
los que para ellos poder volar
robaron nuestras alas,
los que matan con bombas cobardes
y tiros por la espalda,
los que juran haberlas amado antes
de degollarlas.
Que se vayan los que abren
trincheras y hacen la guerra,
los que hablan de patrias, naciones,
razas y banderas,
los gendarmes de nuestros pecados
que ellos alimentan,
los que en nombre de un Dios te
condenan de nuevo en la hoguera.
Que se vayan, que se vayan...
¡Que se vayan!