Cenicienta

No sé a qué esperas
para salir de tu prisión.
No sé a qué esperas
para gritarle "que no"
a quien te quiere conservar
en su cajita de cristal.

No sé a qué esperas
para romper el reloj,
que tu caballo no se convierta jamás
en un ratón.

Quita las cadenas de tu puerta,
rompe los timbres, rompe las rejas,
baja las escaleras de cuatro en cuatro.
No dejes Cenicienta
que te vendan tus zapatos.

No sé a qué esperas
para mirarte al espejo.
No sé a qué esperas
para soltarte el pelo
y contestar "que sí"
cuando suena el teléfono.

No sé a qué esperas
para gozar de tu jardín
y no pensar en más si esta noche
te quedas a dormir.

Quita las cadenas de tu puerta...

No sé a qué esperas
para ajustarte el pantalón.
No sé a qué esperas
para escuchar al corazón.
No dejes que se marche
Sin ti el próximo tren.

No sé a qué esperas
para ponerte de pie
que sean tus pasos los que inventen tu camino
hacia tu edén.

Quita las cadenas de tu puerta...