Canción a La Habana

Las suelas de mis zapatos
están llenas de tu encanto,
pues te he caminado tanto
y pasé en ti tantos ratos,
que ya no sé si es más grato,
verte o extrañarte tanto.

No sé ni cuanto te debo
por colmar mis ilusiones,
poder traer mis canciones
a un pueblo que tanto quiero.
Y a fuerza de ser sincero,
robé noches a tu luna
y así quedarme con una
pa' viajar el mundo entero
y en junio como en enero
decir: "como tú, ninguna".

Habana,
ciudad que me regaló
allí una rumba, aquí un son.
Donde quemé tantas citas
y entregué mi corazón
allá por La Bodeguita,
entre mojitos y ron,
paseando La Habana Vieja,
el Morro y el malecón.

Te llevo tan bien grabada
en la nube de mi mente,
que mi corazón presiente
que al irme, dejé encargada
un trozo de tierra arada
para que, cuando regrese,
vea como ya florece
la Revolución plantada
y ver como en la alborada,
todo un pueblo se estremece.

Pa' La Habana me voy

Antes de dejar las islas
para llegar a La Habana,
pisaba tierra cubana,
buena parte de mi familia,
por eso es que en esta isla
extraño yo no me siento.
Solo traigo sentimientos,
pa' compartir con ustedes.
Si este pueblo a mí me quiere
vive mi pueblo contento.

Pa' La Habana me voy