Enero del 83

Mi mundo estaba en menguante,
y mi credo en el envés,
y llegó el sol una tarde,
del invierno del 83.

Pareció descalabrarse
mi presente y mi después,
regresó el cielo a curarse
un invierno del 83.

Yo estaba allí, ella también,
y las sombras por palidecer.
yo estaba allí, ella también
y un enero del 83.

Se hizo luz en la cintura,
Del diario amanecer
redimiendo la ternura
un invierno del 83.

Hay miradas que perduran
y otras no se dejan ver
con la voz que prefigura
el invierno el 83.

¿Yo estaba allí?

Quiera Dios que la fortuna
del ayer y antes de ayer
nos devuelva la aventura
del invierno del 83.

¿Yo estaba allí?