Dolores la Golondrina / Lola la Piconera
Dolores la Golondrina lloraba por las esquinas en la turbia madrugá.
Por mor de los negros celos, sabiendo que te camelo me tienes desampará.
Y quien te manda ser tan celosa, dice por chuflas el ruiseñor,
con esa cara que es una rosa yo no tendría ningún temor.
Bajo la luz mortecina que desgranaba un farol, lloraba La Golondrina.
De qué me vale quererte tanto, si ya serrana no estás conmigo.
Igual me acuesto que me levanto, pues estos celos son mi castigo.
Martillo, clavo y puñales no tienen comparación
con estas ducas mortales que muerden mi corazón.
Me acosan como a la fiera tus clisos por las esquinas,
quisiera, cuando me muera, tenerte en mi cabecera, Dolores la Golondrina.
Los militares y los paisanos llevan tu nombre como bandera
y dicen todos los gaditanos: Lola, Lolita la Piconera.
Desde Puerta Tierra al Barrio La Viña, señores, qué guerra.
Ay, Lola, Lolita, qué forma esta niña.
¿Dónde vas tan bonita, Lola, Lolita la Piconera?
Que a la vez que va andando va derramando la primavera:
A cantar en un tablao las espinas de un querer,
que en la boca le ha dejao la amargura de la hiel.
Con que viva Andalucía y la pena que se muera,
lo que vale es la alegría y esa copla tan sentía que canta Lola,
Lola, Lolita la Piconera.