Señoras y señores,
distinguido y nunca bien ponderado público,
tengan todos ustedes muy buenas noches;
aquí y ahora envuelto en el vaho caliente
de la selva sudamericana
para amenizar la emanaciones del wisqui
como una fresa reluciente
sobre una montaña de ensoñaciones,
la danza de Papá Bolero.
Pica el ambiente el tambor,
Papá Bolero, Papá
ya va sintiendo que el sol
le entra en la sangre a quemar,
cimbra, cocoquero, palma negra, caña fina
que la gente ya se calla
porque va a empezar la misa.
Luba, congo, caribe
qué dolor, qué dolor te pide
samba, conga, maracas
qué sabor, qué sabor te hamaca,
esto no es bailar, señores,
esto es ir pariendo oraciones,
hay que ver qué bien se agarra
lo que prende en los corazones.
Así como salta la pantera,
así como gira la culebra,
así como se cosecha caña,
así como se mata una araña,
así como un negro encadenado,
así como un negro sublevado,
así como como se hacen los amores,
así como secan los sudores,
así como van por los caminos,
así como pobres peregrinos,
así como se ríe y se llora,
así como se pide limosna,
así como se parte un ladrillo,
así como se afila un cuchillo.
así como se mata a un hermano,
así como se brinda una mano.
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