Canción de la despedida


No digas nada, pues tu presencia me ensancha el alma,
y tu silencio llena los poros de la pared.
En tu mirada la luz sincera abre camino
sin deslumbrar, sin empujar, sin espejismos.

Dime mouriña ¿de qué están hechas tus savias raíces?
¿Con que suave hilo has tejido tu caminar?
Sin darnos cuenta se va expandiendo tu ternura,
como la luna de tu lindura, como la luna en el mar.

Un abrazo de silencio lleno de vida y de paz,
un abrazo de silencio como las flores al caminar,
un abrazo de silencio en un manto universal.
¿Cómo escucharte en tu silencio, en tu humilde despertar?
¿Cómo escucharte cuando te vas, cuando te fundes con el amar?
¿Cómo escucharte cuando te vas sin irte ya jamás?

Te mando gracias, tu estrella brilla, te quiero más.
Las brujas buenas están contigo allá donde vas.
Cuando una avanza las otras danzan su caminar.
Cuando te vayas, deja entreabierto, todas venimos detrás.
Cuando una avanza las otras danzan su caminar.


Writer/s: Mariona Vilar