Novedad discográfica
Reeditan dos discos del Cuarteto Cedrón clave para el presente
Fábulas, de 1964, y Canciones de amor de Occitania y otros casos, de 1975, discos de inusitada luminosidad conceptual y apabullante modernidad sonora debidos al Cuarteto Cedrón, acaban de ser reeditados en una caja común.
Fábulas, de 1964, y Canciones de amor de Occitania y otros casos, de 1975, discos de inusitada luminosidad conceptual y apabullante modernidad sonora debidos al Cuarteto Cedrón, acaban de ser reeditados en una caja común.
Portada de la reedición de los discos «Fábulas» y «Canciones de amor de Occitania y otros casos» de Cuarteto Cedrón.
Télam | Pedro Fernández Mouján - Se trata de materiales que rescatan parte del inmenso trabajo conjunto entre el Tata Cedrón y Juan Gelman y, que claves para entender ciertas líneas de una época, también permiten encontrar los trazos de uno de los recorridos más particulares de la música popular argentina.
Aunque registrados hace 50 y 40 años respectivamente, los materiales —por sonoridad, por concepción letrística, por el modo de hacer estallar la canción y por la capacidad de visitar una tradición desde el lente deformante del presente— parecen escritos hoy o, más precisamente, mañana.
Son discos que podrían ser centrales para la actual escena de la canción urbana, que liberada en parte del yugo del formato rock a veces prefiere urdir en tradiciones ajenas —desde la chanson al tropicalismo— y olvida (o ignora) que 50 años atrás el Cuarteto Cedrón fue uno de los grandes revulsivos que tuvo la canción en castellano.
Si hacia estos discos dirigieran su mirada muchos de los que hoy trabajan desde la zona de los cantautores, encontrarían novedosas y diversas líneas, de solidez granítica, para alzar nuevos edificios cancionísticos, de volver, romper y actualizar, al mismo tiempo, una herencia y una pertenencia.
Guiados por la caleidoscópica, insinuante, sensual y siempre explosiva lírica de Juan Gelman —más allá de letrista con el Tata uno de los grandes poetas de la historia de la literatura argentina— los materiales revelan, desde su gráfica, con exquisito arte de tapa de Alberto Cedrón, una emergencia creativa notable, donde la voz del Tata, enronquecida luego por los años, adquiere una prestancia y una dulzura sorprendentes.
El primer disco, Fábulas, trae consigo dos particularidades dignas de mención, por un lado materializa la primera conformación del Cuarteto Cedrón, que venía funcionando como trío, con el Tata en voz y guitarra, Miguel Praino en violín (luego viola) y César Stroscio en bandoneón, a los que se suma aquí Jorge Sarraute en contrabajo, cuya participación en el grupo se extenderá hasta 1975.
Por otro, además de canciones maravillosas como Peonías para el viudo y Casos, el disco propone dos recitados, de gran valor, de Juan Gelman, solo en voz.
Uno de ellos Sudamericanos, en honor a Isidoro Ducase (1846-1870), montevideano conocido como el Conde de Lautreamont y que con sus Cantos del Maldoror dio impulso a la literatura surrealista; y el otro, Muerte del Emilio Jáuregui, conmovedora y urgente poesía dedicada al periodista y secretario general del gremio de Prensa asesinado por la policía de Juan Carlos Onganía en 1969 durante una manifestación en contra de la visita de Nelson Rockefeller a la Argentina.
Canciones de amor de Occitania y otros casos, de 1975, guarda sus propias perlas: los geniales (cuatro) Los tanguitos de Gelman-Cedrón; El botánico, dos versiones de los anónimos provenzales del siglo XIII de Brunessen y Jaufre y nuevas interpretaciones de Peonías para el viudo y Casos, que vuelven a brillar en su insinuante libertad y belleza.
Editados por Lucio Alfiz Producciones, estos dos discos suceden a la reimpresión de la cantata Del gallo cantor, también de la dupla Gelman-Cedrón, y sobre la masacre de Trelew, en un plan que promete nueva reediciones de la valiosa obra que el cuarteto dejó registrados en más de 50 años de recorrido.
Después de siete años sin publicar nuevo material, Ana Belén lanza Vengo con los ojos nuevos, un álbum compuesto por once canciones originales en el que autores como Pedro Guerra, Vicky Gastelo o Víctor Manuel aportan letras centradas en la mujer, la memoria y la mirada vitalista hacia el presente. La producción corre a cargo de David San José.
A sus 94 años, Omara Portuondo publica Eternamente Omara, un nuevo trabajo discográfico en el que revisita grandes canciones del repertorio cubano acompañada por artistas como Nathy Peluso, Pablo López, Angelique Kidjo y Silvio Rodríguez, quien cantará Demasiado, tema incluido originalmente en Segunda cita (2010).
El nuevo álbum de estudio de Quique González llevará por título 1973 y se publicará oficialmente el próximo 3 de octubre de 2025 bajo el sello Cultura Rock Records. El anuncio llega acompañado de la apertura de la preventa y del lanzamiento de su primer avance, Terciopelo azul, una canción grabada en vivo que define el tono de un trabajo que busca reflejar con honestidad el momento presente del artista.
La violinista barcelonesa Olvido Lanza publica su primer disco en solitario tras una larga trayectoria acompañando a grandes cantautores, Mayte Martín, Manolo García, Miguel Poveda y, de forma especialmente destacada, a Joan Manuel Serrat.
El trovador chileno José Manuel Lattus lanzará este año su nuevo proyecto discográfico titulado Entre amigos y cuerdas, un trabajo centrado en la amistad como eje principal y en la música compartida como medio de encuentro. El álbum, previsto para 2025, reunirá colaboraciones con diversos artistas y amigos, recogiendo el recorrido musical y personal de Lattus a lo largo de los años.