No sé lo que digo
olor a desdicha, no soy ningún sabio.
Ni pincho ni corto, ni callo ni digo,
ni cojo ni aparto, me miro el ombligo.
Pasando por Pinto, busqué Valdemoro.
Olor vino tinto supuran mis poros.
Me muero de pena, no tengo regazo,
tan solo te pido me des un abrazo.
De malas noticias me colmas hermano.
Tampoco hay caricias. Calienta el verano.
Ni blanco ni negro, ni visto y no visto,
ni yerno ni suegro, ni tonto ni listo,
ni dame ni toma, ni paro ni arranco.
¿A pelo o con goma? Después entre tanto
Ni río ni lloro, ni puedo ni quiero
ni plata ni oro, me quito el sombrero
ni digo ni Diego, ni muela ni diente
me paso o no llego, ni frío ni caliente.
Ni pero, ni nada, ni Mayo, ni Octubre,
ni sable, ni espada, ni teta ni ubre.
Y yo me planteo, ¿sin ti o contigo?
¿Soy guapo, soy feo?, no sé lo que digo.
No sé lo que digo, no se lo que digo,
yo no sé lo que digo.
Miguel Poveda hizo suyo el Gran Teatre del Liceu de Barcelona —uno de los grandes Teatros de la Ópera del mundo— en su concierto Distinto del 15 de Octubre, en el marco de la edición de 2025 del "Festival Jazz Barcelona".
El músico argentino Milo J lanza La vida era más corta, un álbum doble donde se cruzan el folklore argentino y los sonidos urbanos contemporáneos, en una obra que reúne a varias generaciones y cuenta con colaboraciones destacadas como las de Mercedes Sosa y Silvio Rodríguez.
La cantante y compositora catalana Joana de Diego lanza un trabajo que une poesía y música de raíz, con textos de Juan Gelman, Salvador Espriu, Josep Palau i Fabre y Alberto Szpumberg, y una fusión sonora que transita entre Argentina, Brasil y el Mediterráneo.
La compositora Antía Muíño y el pianista Abe Rábade —ambos gallegos— publican un doble single con forma de EP, donde se cruzan el folk, el jazz y el pop neoclásico como puente entre dos sensibilidades musicales que se conocen desde hace años.
El ícono del rock argentino y el exlíder de The Police unen voces en In the City, una colaboración inesperada y emotiva, grabada entre Buenos Aires y Miami. La canción, escrita por García y cantada a dúo con Sting, rescata el espíritu urbano y melódico de ambos artistas.