El canto del pueblo
El canto es como un pañuelo
que enjuga el llanto a la vida
cuando esta es paloma herida
que no puede alzar el vuelo.
Puede el canto ser consuelo
que mitigue la aflicción,
mas nunca resignación
para el pueblo que lo escucha,
puesto canto que impide lucha
no es verdadera canción.
II.
Hay que cantar al amor
con la mejor poesía,
porque amar es energía
de un acto liberador.
Pero nunca haga el cantor
de su cantar un señuelo,
lo mismo que el ave en celo
que canta hinchando el plumaje
y no busca maridaje
sino pisa y alza el vuelo.
III.
El canto ha de ser profundo
como son nuestros problemas,
y ha de abordar en sus temas
los problemas de este mundo.
Ni por un solo segundo
ha de olvidar el cantor
que su deber y su honor,
su función y su destino
son alumbrar el camino
del pueblo trabajador.
IV.
El canto debe ser claro
como el cielo en el verano,
como el alma del paisano,
como la lumbre de un faro.
El canto debe ser caro,
tanto que no tenga precio;
y aunque no lo entienda el necio
o lo rechace el patrón,
ha de cumplir su misión
si el pobre le da su aprecio.
V.
El canto no es privilegio
de seres superdotados:
tanto pueden iletrados
como aquellos con colegio.
Así pues, no hay trato regio
que exigir pueda el poeta
si su labor interpreta
con igual celo y afán
que el obrero que hace un pan
o conduce una carreta.
VI.
Haga el cantor de su canto
indestructible herramienta:
que no dude, que no mienta
ni la doblegue el quebranto.
Que su alma sea ese amianto
que ni al peor fuego le teme.
Que por tormentas reme
con proa a la libertad
y en su lumbre de verdad
toda mentira se queme.
VII.
De su canto haga el cantor
arma letal y certera:
barricada guerrillera,
machete degollador.
Saque su canto mejor
en el preciso momento,
póngase de cara al viento
pero a favor de la historia
y el clarín de la victoria
vibrará en el firmamento.
VIII.
Tras la última batalla,
libre la gente oprimida,
vendrá otro canto a la vida
porque el cantor nunca calla:
¡Este es un himno que estalla
en notas primaverales,
y a sus acordes triunfales
todos los seres humanos
al fin se sienten hermanos
porque todos son iguales…!
(1974)
Socabón
La cantautora mexicana Natalia Lafourcade actuó en solitario ayer domingo en el Liceu de Barcelona en el marco del Suite Festival, en un concierto cargado de emoción radical, depuración estilística, mestizaje sonoro, dramaturgia íntima y canción de autor en estado puro. Sílvia Pérez Cruz fue su invitada en sensible abrazo musical.
La exposición Cómo diseñar una revolución: La vía chilena al diseño, que podrá verse en el Disseny Hub Barcelona del 2 de julio al 16 de noviembre de 2025, recupera a través de 250 piezas —incluyendo las portadas de discos de la Nueva Canción Chilena— el papel fundamental del diseño gráfico e industrial en el proyecto de transformación social impulsado por Salvador Allende.
El 22 de julio, más de una docena de artistas se reunirán en Barcelona para rendir tributo a Dioptria, la obra más emblemática de Pau Riba y una de las más referenciales para la Nova Canço. Con la implicación de sus hijos; De Mortimers, la banda que lo acompaño los últimos 20; y nombres como Maria del Mar Bonet, Roger Mas, Pascal Comelade, Oriol Tramvia o Rita Payés; el concierto se plantea como una celebración única de su legado.
El periodista e investigador cubano Humberto Manduley presenta La memoria girando en la luz: Santiago Feliú en mis recuerdos, un libro que rescata la figura del trovador cubano desde la memoria personal, recorriendo su obra, sus influencias y su lugar en la canción de autor contemporánea.
Camila Guevara, joven artista cubana de 24 años nieta de Pablo Milanés y del Che Guevara, ha iniciado su carrera musical con el disco Dame flores, tras un año marcado por la pérdida de su madre, su abuelo y su padre, Camilo Guevara. A pesar del dolor, su voz y su música la han sostenido, componiendo desde emociones intensas y personales.