Mira, María
Yo bien querría
Hacerte presa
De mi poesía
Mas hoy, María
Para mi sorpresa
Para mi tristeza
Precisas partir
Parte, María
Que estás tan bonita
Que estás tan ansiosa
Por abandonarme
Siento, María
Que estás de visita
Tu cuerpo se agita
Queriendo danzar
Parte, María
Que estás toda desnuda
Que la luna te llama
Que estás tan mujer
Arde, María
En la llama de la luna
María gitana
María marea
Parte cantando
María huyendo
Contra el ventarrón
Jugando, durmiendo
En un valle de sierra
En un canto vacío
En un lecho de río
En los brazos del mar
Ve, alegría
Que la vida, María
No pasa de un día
No te detendré
Corre, María
Que la vida no espera
Es una primavera
No la puedes perder
Anda, María
Yo sólo tendría
Mi agonía
Para ofrecerte
(1971)
Versión de Silvia Ulrik y Roberto Echepare
A sus 94 años, Omara Portuondo publica Eternamente Omara, un nuevo trabajo discográfico en el que revisita grandes canciones del repertorio cubano acompañada por artistas como Nathy Peluso, Pablo López, Angelique Kidjo y Silvio Rodríguez, quien cantará Demasiado, tema incluido originalmente en Segunda cita (2010).
La violinista barcelonesa Olvido Lanza publica su primer disco en solitario tras una larga trayectoria acompañando a grandes cantautores, Mayte Martín, Manolo García, Miguel Poveda y, de forma especialmente destacada, a Joan Manuel Serrat.
La pianista cubana Malva Rodríguez —hija de Silvio Rodríguez y Niurka González— ofreció un programa que recorrió géneros clave de la tradición musical de la isla, con obras de Lecuona, Caturla, López-Gavilán, Oliva, Alén y un cierre con Chopin, en una actuación ovacionada en el Centro de las Artes de la ciudad francesa.
Marina Paredes, cantautora y actriz gestual nacida en La Vila Joiosa (País Valenciano) en 1998, lanza en junio de 2025 su nueva canción: Nana de la prisa, una composición íntima y profundamente mediterránea que busca arropar con dulzura los ritmos acelerados de la vida contemporánea.
La cantautora mexicana Natalia Lafourcade actuó en solitario ayer domingo en el Liceu de Barcelona en el marco del Suite Festival, en un concierto cargado de emoción radical, depuración estilística, mestizaje sonoro, dramaturgia íntima y canción de autor en estado puro. Sílvia Pérez Cruz fue su invitada en sensible abrazo musical.