XXV Festival Tradicionarius 2012

La Cobla Catalana dels Sons Essencials, los diferentes paisajes sonoros de la música tradicional catalana

por Pol Ducable Rogés el 27/02/2012 

Un artículo a cuatro manos entre nieto y abuelo: un encuentro entre dos visiones de un mismo concierto y un concierto que es un encuentro entre la modernidad y la raíz de la música tradicional catalana.

La Cobla Catalana dels Sons Essencials

© Ivan Autet

Hace unos días fui a ver con mis abuelos la Cobla Catalana dels Sons Essencials, formación dirigida por Marcel Casellas, que tocaba en el marco del XXV Festival Tradicionàrius 2012 y en coproducción con el Auditori de Barcelona, que lo enmarcó dentro de su ciclo de Música para Cobla.

La propuesta era un conjunto musical basado en los instrumentos de la cobla de sardanas (flabiol y tambor, tible, tenora, fiscorn, trompeta y contrabajo) más otros instrumentos de sabor mediterráneo-catalán como el violín, la guitarra, el guitarró (parecido al cuatro venezolano), clarinete y saxofón, más el ritmo de una batería y la voz de una cantante tradicional como es la joven Heura Gaya. En total, una formación de nueve multi-instrumentistas camaleónicos, capaces de tocar una rumba catalana o un contrapàs tradicional, o de viajar del Atlas marroquí a los Pirineos catalanes. Y todo con grandes dosis de improvisación, como le gusta a Marcel Casellas hacer su música: espontánea y con gusto.

El concierto nos pasea por los diferentes paisajes sonoros de la cultura musical catalana, paisajes de ayer y paisajes de hoy. Desde los más cercanos a mis abuelos, quienes me acompañaron esta vez; hasta los más modernos, mis paisajes como músico en activo que también soy.

Días más tarde del concierto recibí por correo ordinario (ahora nos mandamos e-mails y miramos diarios de música por Internet ¿verdad?) una carta manuscrita de mi abuelo, Francesc Rogés, donde me explicaba sus sensaciones después del concierto: 

"Ayer fue nuestro estreno en el recinto del Auditori de Barcelona, y fue en la actuación de la Cobla Catalana dels Sons Essencials. Toda una declaración de principios: catalana, sons ('sonidos' en catalán) y essencials ('esenciales' en catalán). El espectáculo es coherente con lo anunciado. Es un concierto pedagógico que refuerza al propio grupo musical y busca la complicidad de la audiencia. Baila en el justo equilibrio entre el disfrutar de los componentes en cada una de sus disciplinas dramático-musicales y la obligación de entretener.

La dificultad puede presentarse cuando al querer dar cabida a tantas exigencias, se hagan demasiado largas las piezas o quede un poco diluido el grupo; como en una tela pictórica cuando los colores quedan movidos y son todos estridentes y poco diáfanos.

Es una oferta dramática de sonidos que quiere ordenar la improvisación. Pone de manifiesto como Marcel Casellas ha mojado, que no remojado, en el pozo identitario y está comprometido en la encarnación del mensaje del poeta catalán J.V. Foix: «me exalta lo nuevo y me enamora lo viejo»".

El concierto en el Auditori de Barcelona tuvo la presencia también de uno de los grandes instrumentistas de tenora, director de cobla de sardanas, y compositor del momento: Jordi Molina. Mi abuelo y yo quedamos entusiasmados con el solo de tenora con el que nos deleitó, como quien queda prendido de la aria de ópera que acaba de cantar una soprano espectacular. La carta acaba así: 

"Cuando gozaba del solo de Jordi Molina se filtraba la magia del hechizo cual inmoviliza las serpientes al invadir la música". 

Y mientras mi abuelo y yo hablamos de colores y timbres musicales, mi abuela aún tararea aquella sardana que cantaba de joven y que la Cobla había tocado con tan gusto, el Per tu ploro de Pep Ventura, una composición de uno de los padres de la sardana.

LO + LEÍDO